Cómo limpiar la lavadora – Quitar el mal olor de la lavadora
Vamos a compartir unos cuantos trucos o consejos de mantenimiento sobre la limpieza de la lavadora en su interior para eliminar malos olores que puedan estar haciendo que nuestra ropa huela mal según la hemos limpiado.
Habitualmente recomendamos realizar este tipo de limpieza una vez al año, pero también depende del uso que le demos al electrodoméstico y por lo tanto puede ser necesario que aumentemos el número de limpiezas que debamos hacer.
Tenemos que entender que es un electrodoméstico que necesita limpiezas frecuentes para mantener unos buenos resultados lavado tras lavado.
Consejos sobre cómo limpiar la lavadora
Habitualmente el primer problema que nos vamos a encontrar con la lavadora es que se acumula suciedad, restos de jabón y restos de suavizante entre otros. Estos restos se secan y quedan alojados en la cubeta y en todas las partes funcionales de la lavadora lo que hace que con el tiempo aparezcan desde malos olores a manchas en casos extremos.
Quitar el mal olor de la lavadora
Para quitar esos restos de jabón y otros productos de limpieza podemos poner un ciclo largo de la lavadora a 60 grados (agua caliente) con unos 3 vasos de vinagre en la cubeta. El vinagre actúa sobre el jabón y el resto de elementos eliminándolos del electrodoméstico.
Podemos sustituir el vaso de vinagre por lejía o por los preparados que actualmente existen en el mercado compuestos por algún tipo de acido o base para eliminar el jabón y que se echan dentro de la cubeta poniendo un ciclo de lavado normal.
También podemos introducir una toalla vieja en el bombo de la lavadora, poner un ciclo de lavado y detergente normal en la cubeta y en el momento en que la lavadora comienza a coger agua añadir medio litro de vinagre de modo que conseguimos el mismo resultado.
Si crees que es necesario desinfectar la lavadora es buena idea sustituir el vinagre por lejía o ácido cítrico y pon un lavado con agua caliente (a máxima temperatura), sobre todo en lavadoras con poco o ningún mantenimiento y que pueden haber estado paradas durante mucho tiempo.
Cómo limpiar las gomas y los dispensadores
Si además las gomas y la cubeta están sucias o con restos de jabón, para las gomas os recomendamos limpiarlas con una bayeta con lejía, dejando que actúe durante un tiempo (en ocasiones toda la noche) y aclarando cuando terminemos de limpiar y para la cubeta o dispensadores de jabón y suavizante podemos limpiarlos con vinagre para aflojar y eliminar los restos aclarándolos también cuando terminemos.
Mantenimiento de la lavadora
Ahora que ya sabemos cómo quitar el mal olor de la lavadora y que no se nos pegue a la ropa, necesitamos mantener los resultados el máximo tiempo posible y además cuidar nuestro electrodoméstico para alargar su vida útil.
Lo primero es ventilar, es bueno dejar la puerta de la lavadora abierta o semiabierta entre lavados, así nos aseguraremos que no proliferará el moho dentro de ella.
El secado del tambor también es importante del mismo modo que si hemos derramado jabón o suavizante debemos limpiarlo antes de que se seque y pueda convertirse en una fuente de olores. También podemos sacar el cajetin al menos una vez al mes y limpiarlo con agua tibia.
Para secar el tambor podemos utilizar una bayeta absorbente después de cada lavado de modo que eliminemos el exceso de humedad. Nos tenemos que fijar sobre todo en la goma y las juntas ya que en estos lugares es donde más fácilmente se va a acumular la humedad y por tanto puede aparecer más fácilmente moho.
Debemos sacar la ropa recién lavada rápidamente para evitar del mismo modo la proliferación del moho así como para asegurar la correcta ventilación del interior de la lavadora.
No es buena idea utilizar la lavadora como cubo de la ropa sucia, es decir, si acumulamos en su interior la ropa sucia posiblemente la lavadora coja olor y el propio tambor acabe oliendo mal de modo que se lo pase a la ropa. Dejar secar la ropa sucia por ejemplo la ropa impregnada de sudor también es buena idea para que no se lo pase al resto de ropa a lavar a no ser que se ponga de inmediato el ciclo de lavado.
Limpiar el filtro además de ser una de las fuentes de falsas alarmas suele ser uno de los puntos a los que le hacemos poco caso. Es muy importante limpiar el filtro de la lavadora de forma periódica eliminando todos los restos de pelusas, fibras y suciedad. Esta operación suele ser fácil de realizar pero muchas veces la lavadora deja de funcionar cuando el filtro está sucio y es fuente de llamadas a los servicios técnicos como el nuestro.
Si estamos ante una lavadora que sólo se utiliza en ciertas temporadas es interesante cerrar la llave de paso de modo que no entre ningún resto de agua o humedad y que esté completamente seca. En estos casos es bueno también revisar las gomas y cambiarlas si es necesario.
Averías comunes en lavadoras
Además del mantenimiento habitual y en las gomas que se debe hacer a una lavadora, las averías comunes en las lavadoras a las que nos enfrentamos día a día son:
– El tambor no gira, es decir que no lave, lo que habitualmente es problema de la correa del motor al tambor, si el motor no hace ruido entonces si es un fallo grave del motor y por lo tanto un problema más costoso.
– El tambor gira pero no lo hace de forma regular, esto puede ser un problema tanto de la correa como antes pero también del motor aunque suele ser un desequilibrio en el centrifugado.
– No entra agua: El problema habitualmente está en la electroválvula que puede estar atascada.
– No sale el agua o no desagua, el problema puede estar en la bomba o en el filtro, que esté obstruido.
– La lavadora no obedece. El problema está en el programador y puede ser que algún sensor esté funcionando incorrectamente, que se necesite una reprogramación o una sustitución de la pieza.
Si tienes algún problema de este tipo o relacionado no dudes en ponerte en contacto con nuestro servicio técnico para poder solucionar tu problema lo antes posible.
- On 18 abril, 2018